Estoy rodeado de personas que creen que consumir les ayudará a ser más felices. Creen que tener posesiones, éxito, poder, y todo lo que ello conlleva les hará más felices. Personas que tienen un concepto de la felicidad a mi gusto equivocado. Veo un documental sobre indígenas que viven con lo más básico para alimentarse, y son felices. Veo un perro jugando en el campo, con solo lo necesario para alimentarse, y es feliz. Cada vez que viajo por el mundo, no dejo de sorprenderme. La manera en que cada cultura vive el amor, la amistad, el respeto, el trabajo y todos los valores que nos rodean. Es tan distinto de lo que nos cuentan. Y sin embargo a mi gusto también están equivocados en la mayoría de culturas que he tenido el placer de conocer. Será prepotente decir esto, pero así me siento, pues ya he entendido lo que es ser feliz y cual es el sentido de mi vida. Saber lo que quiero.
Por primera vez en mi vida ya sé lo que quiero. Y no me refiero a que antes no supiese que quería. Quería cosas, como tú también las quieres, pero carecía de la información necesaria para saber que quiero realmente. Si vives toda tu vida en un castillo, pensaras que lo más feliz es lo mejor del castillo, sin saber que fuera del castillo hay otro mundo.
Ahora tengo toda la información para entender el mundo, entender los comportamientos sociales, entender la manera de pensar del ser humano, entender como se ha construido la humanidad, entender el porque de lo que me rodea, entender que hay alternativas a la sociedad que conocemos, y poder actuar con mi vida en consecuencia.
He pasado demasiado tiempo perdido, intentando encajar en una sociedad que nunca comprendí, que nunca quise. Perdí el tiempo intentando gustarle, intentando satisfacer lo que esperaba de mí. Diciéndome que esa era la única alternativa, amargando día tras día por no estar a la altura de lo que se esperaba de mí. Luchando como un poseso por conseguir premios vacíos, sensaciones espejismo. Y todo lo que me ha dicho la gente siempre es: "La vida es así, anda o revienta". Siento decirte, que no estoy de acuerdo.
Me estoy quitando esas cadenas todavía, el tener que fingir, el tener que gustar, el tener que hacer "lo que se debe hacer". Yo no pedí esto, se me impuso, y costará alejarse de todo esto. Poco a poco. Y no importa cuantos me amenacen con perder un trabajo, su amistad, o cualquier cosa que digan. Yo ya estoy decidido a seguir este camino.
Seré feliz. Habrán días buenos, y días malos, porque la vida es así. Habrá días que me estresaré por las cosas que suceden en mi vida, y las de los de mi alrededor. Si quiero luchar contra este concepto de sociedad, contra esta manera de plantear la vida, la familia, el amor, la amistad, el trabajo, los sentimientos, tendré que mojarme. Pero ya no desesperare por saber que hacer en este mundo, por saber como tengo que vivir mi vida. Veo las cosas como son, y me doy cuenta que ante la única persona que tengo que responder es yo mismo, lo que siento, y como analizo lo que siento. Por eso ya sé, que mientras pueda disfrutar de mi cuerpo, mi vida, y mi libertad, seré feliz.
Probablemente no entiendas esto, me llames imbécil o pienses que es absurdo. Probablemente no tengas las bases para entender a que me estoy refiriendo. Si no eres capaz, por ejemplo, de no ofenderte cuando alguien critica tu selección, tus ideas políticas, tus gustos y pasiones, tu manera de ver las cosas, estas todavía muy lejos de poder entenderme. Si piensas que el amor es que la otra persona se comporte como tu quieres, que te haga feliz, que te cuide y te consuele cuando estas triste, estas muy lejos de poder entenderme. Si no puedes comprender que la mayoría de tus amigos lo son por conveniencia, y no porque realmente sean tus amigos, estas muy lejos de poder entenderme. Si no entiendes que el mundo no gira alrededor de ti y los tuyos, estas muy lejos de poder entenderme. Si crees que la felicidad es estar todo el rato contento, reír, no tener problemas, no tener agobios, estas muy lejos de entenderme.
Me gustaría que pudieses entenderme. Quizás algún día ocurra. Pero lo más probable es que como tantos otros me llames radical, enfermo, hippie, perroflauta, anarquista, inconsciente, utópico y tantas otras cosas. Me digas que no puedo juzgar, y que no se nada de la vida, y tantas otras cosas que me han dicho. Probablemente, eso ocurra.
Mientras tanto yo seré feliz. Y eso es algo que nadie me podrá quitar, ni siquiera tú. Por mucho dolor, por mucha mierda, por mucho que sufra, nadie podrá arrebatármelo. Pues ya sé que quiero para ser feliz. Saber lo que quiero y luchar por ello, lo consiga o no.
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